Resumen

Atentados terroristas por bomba: aspectos médicos

Hernando Lorenzo AF , Coma Samartín RR , Chuliá Campos V , Álvarez Leiva C , Valverde Conde A

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Centro Europeo de Medicina de Cat

DOI

Cita

Hernando Lorenzo AF , Coma Samartín RR , Chuliá Campos V , Álvarez Leiva C , Valverde Conde A. Atentados terroristas por bomba: aspectos médicos. Emergencias. 1992;4:21-5

Resumen

Los incidentes terroristas se han multiplicado por diez entre 1968 y 1980, según el Primer Informe OTAN sobre terrorismo internacional, publicado en 1987; se han producido en todo el mundo, entre 1973 y 1983, más de 5.075 incidentes con 3.689 muertos y 7.991 heridos. En Belfast2 (Irlanda del Norte) se produjeron 1. 532 víctimas por atentados terroristas durante el período de los tres peores años de disturbios civiles, entre agosto de 1969 y junio de 1972. En Jerusalén (Israel) se produjeron 511 víctimas en 4 años y medio, en el período comprendido entre mayo de 1975 y noviembre de 1979, en que se produjeron 24 explosiones por atentados terroristas con bomba. En el atentado de la estación de Bolonia (Italia), a las 10.25 horas del 2 de agosto de 1980, se produjeron 293 víctimas, 73 de las cuales fallecieron en el lugar del suceso, y otras once murieron en las 2 semanas siguientes. La carga se estimó que correspondía a 20 kg de TNT. En Munich se produjo el 26 de septiembre de 1980, durante la Oktoberfest, otro atentado con bomba, que causó 13 muertes e hirió a 225 personas. El 15 de julio de 1983 explosionó otra bomba en el aeropuerto de Orly, en París, a las 14. 00 horas, en el mostrador de la compañía Turkish Airlines, con 68 víctimas, de las cuales ocho fallecieron de forma inmediata. Hubo dos fases: 1. Improvisación (por lo general debido a falta de personal especializado). 2. Organización: con reconocimiento inicial, clasificación, asistencia, evacuación dirigida y medicalizada. También en París se produjeron once explosiones de bomba entre el 7 de diciembre de 1985 y el 17 de septiembre de 1986, que produjeron 13 muertes iniciales, y 255 heridos (de los cuales fallecieron 7 de forma diferida). Sólo dos explosiones se produjeron al aire libre. En cinco de estas ocasiones, hubo situaciones de víctimas en masa con más de 30 personas que precisaron simultáneamente asistencia médica), 8. Las zonas anatómicas más afectadas fueron: extremidades inferiores (44, 4 % de casos), extremidades superiores (23, 5 %), tronco (12,8 %) y cabeza y cuello (19,3 %). En los atentados a las casas cuartel de la Guardia Civil, en Zaragoza (11 de diciembre de 1987), y Vic, en Barcelona (29 de mayo de 1991), se produjeron 11 muertos y 62 heridos, de los cuales 24 ingresaron en centros hospitalarios, en el primero, y 9 muertos y más de 40 heridos, en el segundo, permaneciendo ingresados en hospitales 12 de ellos a las 24 horas de haberse producido.Los atentados terroristas con explosivos presentan una serie de características casi constantes, que desde el punto de vista médico determinan unas pautas de actuación casi estereotipadas, y que exigen una disciplina de aplicación desde la misma zona de impacto hasta la sala de urgencias del hospital. Se revisan los mecanismos lesivos y la preparación extra e intrahospitalaria ante la necesidad de asistencia sanitaria en situación de víctimas en masa producidas en explosiones debidas a atentados terroristas por bomba.

 

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