El golpe de calor clásico, la patología de cada verano

Cada verano, al llegar el calor, asistimos a una importante proliferación de notas de prensa que hacen referencia a la patología por calor. Por este motivo le queremos comunicar nuestra experiencia del verano de 1994 con esta patología. Las descripciones históricas del golpe de calor datan de más de 2.000 años atrás, cuando una armada Romana fue destruida en Arabia a consecuencia del calor. En el año 1756, 123 presos británicos fallecieron en Calcuta durante una noche calurosa. En 1983, durante una maratón popular en París, decenas de participantes sufrieron en diverso grado patología por calor, tres de los pacientes fallecieron por golpe de calor. En los últimos dos años se han comunicado en la literatura casos aislados de Golpe de Calor, pero las únicas comunicaciones de gran número de afectados pertenecen al Heatstroke Center en La Meca (Arabia), donde se producen peregrinaciones masivas de personas, no siempre bien preparadas y donde el clima es especialmente caluroso. En nuestro medio se ha comunicado recientemente una serie de 78 casos recogidos a lo largo de los años 1988 y 1989 en la ciudad de Sevilla, la llamada sartén de Andalucía. El día 6 de julio de 1994, en la provincia de Almena, la temperatura alcanzó en varias zonas más de 40°C, durante muchas horas del día. Junto a esto se dieron dos circunstancias que complicaron la meteorología: en primer lugar, la presencia de un viento muy caliente (conocido como terral) proveniente del norte de África, y en segundo lugar, la existencia de un gran incendio en la vecina sierra de los Filabres. Estas especiales circunstancias climáticas motivaron que varias decenas de pacientes acudieran al Servicio de Urgencias de nuestro Hospital con diversos grados de patología por calor. Cuatro de estas personas precisaron ingreso hospitalario en la Unidad de Medicina Intensiva (UMI) por Golpe de Calor. Pasamos a describir estos casos.